Un riesgo carretera Villahermosa-Coatzacoalcos; tramo de Paradero 18 carece de señalamientos y reductores

En un punto estratégico de vigilancia sanitaria, la omisión de medidas preventivas podría tener consecuencias fatales. Andrés Pérez Pavón, encargado del sistema eléctrico de la cuarentenaria El Paradero 18, ubicada sobre la carretera federal Villahermosa-Coatzacoalcos —a escasos metros del entronque con Agua Dulce— lanzó un enérgico llamado a las autoridades para que se atienda con urgencia la colocación de reductores de velocidad y señalización adecuada en la zona.

"Esto es una bomba de tiempo. Aquí entran y salen constantemente camiones pesados, de los conocidos como ´panzones´, y la gente viene volando. Ya ha habido desprendimientos de llantas, accidentes y otros incidentes que, por suerte, no han cobrado vidas. Pero no podemos depender de la suerte", advirtió.

La cuarentenaria funciona como punto de inspección zoosanitaria para el control del traslado de productos pecuarios, por lo que el tránsito de vehículos pesados es continuo. 

Sin embargo, esta dinámica choca con la alta velocidad a la que circulan los vehículos sobre esta vía de comunicación federal, lo que ha generado una creciente preocupación entre quienes trabajan o transitan por el lugar.

PASARÁ UNA DESGRACIA

Pérez Pavón recalcó que, además del puesto de revisión, a pocos metros del sitio operan restaurantes, llanteras, comedores, gasolineras y otros comercios que requieren constante acceso y salida al flujo vehicular. "Es una zona activa. La gente entra y sale todo el tiempo, y si no se colocan topes o señalética visible, un día va a pasar una desgracia", insistió.

El encargado reconoció que se trata de una carretera de alta velocidad, pero argumentó que eso no impide que se tomen medidas mínimas de prevención. "No estamos pidiendo algo extraordinario. Con algunos reductores y señalización clara se podría reducir muchísimo el riesgo".

La petición de Andrés Pérez se suma a una preocupación compartida por transportistas, trabajadores del lugar y vecinos que a diario presencian maniobras peligrosas y frenazos de último segundo; de hecho aprovecharon la visita de un Senador para entregar un oficio son la solicitud formal, con la esperanza de una pronta solución.